Ejercicio durante el embarazo

Durante el embarazo, podemos experimentar cambios físicos que nos hagan sentir que no nos reconocemos; nuestro cuerpo puede cambiar y llegar a ser totalmente distinto a lo que conocíamos. Pese a ser conscientes de que un ser vivo crece en nuestro interior, y de que es, posiblemente, una de las cosas más bonitas que viviremos, en ocasiones, sentir que no controlamos nuestros cambios puede dar lugar a una continua sensación de malestar.

Por ello, es de vital importancia que, durante el embarazo, llevemos a cabo determinadas actividades que nos hagan sentir realizadas y nos ayuden en nuestro objetivo de encontrar la estabilidad que tanto ansiamos. El ejercicio es una clave para conseguirlo.

Hoy, desde Dr. Brown’s, te contamos qué debes tener en cuenta a la hora de hacer deporte durante la gestación del bebé. Sí, no pasa nada si haces ejercicio durante estos nueve meses, pero no todo está permitido. ¡Es hora de que lo descubras!

¿Qué beneficios tiene el ejercicio durante el embarazo?

En principio, no existe ningún riesgo en que las mujeres embarazadas realicen actividades durante la gestación del bebé, salvo aquellos casos en los que se trate de embarazos delicados, de alto riesgo o cuando tu ginecólogo te lo desaconseja expresamente.

A grandes rasgos, el deporte nos permite sentirnos mejor con nosotras mismas, además mejora nuestra resistencia física y nuestra autoestima. Con el ejercicio, sentimos que somos dueñas de nuestro cuerpo y aumenta nuestra energía, por lo que nos ayuda a hacer frente a síntomas más que frecuentes en el embarazo: estrés, insomnio, agobio, fatiga…

Además, durante el tiempo que nos ejercitemos, lograremos que nuestros músculos sean más fuertes y mejore nuestro riego sanguíneo, así como el sistema respiratorio, lo que nos puede servir de ayuda a la hora de dar a luz. El deporte es, por tanto, una forma de preparación de cara al nacimiento del pequeño o pequeña.

Como guinda del pastel y forma de solución a muchos complejos de las nuevas madres, el deporte causa que, durante el embarazo, acumulemos menos grasa, por lo que podremos recuperar de forma más rápida la figura que teníamos antes de quedarnos embarazadas. Eso sí, ¡no se trata de adelgazar durante el embarazo!

¿Y qué riesgos?

Por lo general, no hay motivos por los que no podamos realizar ejercicio durante el embarazo, salvo que suframos algún problema de salud o condición que nos lo impida. Estos casos son la rotura prematura de membranas, problemas cardiovasculares, embarazo múltiple, antecedentes de aborto o hipertensión arterial.

Asimismo, debemos acudir a nuestro médico si, durante la realización de un deporte, experimentamos síntomas como falta del aliento, hemorragia, golpe en el vientre, mareo o dolores en cualquier zona. 

Si podemos hacer ejercicio, ¿cuándo comenzamos?

El primer trimestre de embarazo es en el que mayor riesgo de aborto existe, con lo que debemos evitar esfuerzo físico en exceso, especialmente si ya hemos sufrido un aborto anteriormente. Antes de comenzar a hacer ejercicio, es recomendable que primero dejemos que desaparezcan las molestias de los primeros meses.

Ya en el segundo trimestre se reducen los riesgos y nuestra barriga todavía no es lo suficientemente grande como para molestar, por lo que podemos empezar a hacer ejercicio, aunque siempre debe ser de forma suave y gradual, es decir, no debemos forzar. Para ello, podemos probar a caminar, nadar o realizar yoga o pilates, que, además, nos ayudarán a relajar la mente.

En la etapa final del embarazo, es importante que reduzcamos la intensidad de los ejercicios que realicemos. La mejor opción es caminar, pues nos permite llegar preparadas al parto, ya que, durante la caminata, se produce el balanceo pélvico.

¿Qué deportes no debemos hacer nunca?

Hay deportes que, por sus características, no debemos probar durante el embarazo, ya que podemos recibir un golpe que afecte a la gestación del bebé. Estos deportes son, principalmente, los que presentan altos niveles de intensidad (aeróbic), los de lucha (boxeo, lucha, taekwondo…) o los que se juegan en equipo (balonmano, fútbol…). Además, también debemos evitar actividades como la escalada, el paracaidismo, el submarinismo, el esquí o la gimnasia rítmica.

 

¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de hacer ejercicio?

Hay ciertos consejos que debemos seguir durante el tiempo que realicemos ejercicio. Toma nota, porque son muy importantes:

  • Debemos realizar 15-45 minutos de ejercicio tres veces a la semana, siempre con un día de por medio para que podamos descansar.
  • Antes de comenzar el ejercicio, debemos estirar los músculos para evitar posibles lesiones. Debemos hacer lo mismo al finalizar la actividad con el objetivo de enfriar los músculos.
  • Es importante que elijamos un calzado adecuado, que cuente con un sistema de amortiguación para suavizar el impacto. Así mismo, debemos utilizar ropa que no sea muy ajustada, un sujetador deportivo y no olvidarnos nunca de una gorra que nos proteja del sol.
  • Con el fin de no deshidratar, siempre debemos tener una botella de agua. Además, nunca debemos hacer ejercicio con el estómago vacío. Podemos comer frutos secos o plátanos 30 minutos antes de comenzar.
  • Durante el ejercicio, debemos tener en cuenta el ritmo cardiaco, ya que no puede superar ciertas pulsaciones, pues el bebé también aumenta el suyo para protegerse. Truco para calcular cuántas pulsaciones por minuto no debemos superar: (210 – tu edad) x 0,7.
  • Nunca debemos forzarnos más de lo que podamos. Si sentimos cansancio o mareos, debemos parar inmediatamente. Tenemos que actuar de la misma forma si hace mucho calor o sentimos que hay demasiada humedad en el ambiente.