Ser padres en una familia numerosa

Ser padres no es siempre una tarea fácil. Es indudable que los pequeños de la casa nos aportan una felicidad inmensa cada día, con sus carcajadas, su inocencia o sus andares. Sin embargo, en determinadas ocasiones, sobre todo a causa del estrés, nos podemos ver superados por la situación.

Imagina, entonces, que, en lugar de tener uno o dos hijos, perteneces a una familia numerosa, es decir, que tienes tres o cuatro hijos (familia numerosa general) o cinco o más hijos (familia numerosa especial). Como es de esperar, este estrés que hemos mencionado hace poco se incrementa a tales niveles que podemos llegar a sentir, y es lo más normal, que no podemos más.

El motivo no es siempre el mismo. A veces, es la falta de tiempo para nosotros mismos; otras, la dura carrera por llegar bien a fin de mes. Sea como sea, el resultado es siempre el mismo: la constante sensación de que no llegamos a buen puerto. 

Por esta razón, hoy aportamos nuestro pequeño grano de arena con algunos consejos que se pueden aplicar a cualquier familia numerosa, general o especial. ¡Toma nota! No te salvarán la vida, pero te la harán más fácil.

 

¿Qué tal si nos organizamos?

La principal clave para no vernos desbordados es contar con una muy buena planificación que nos permita ser lo más eficaces posible. Ésta puede estar sujeta a cualquier modificación, pero partiremos de una base muy sólida para afrontar cada semana con la mejor de las opciones.

Para esta organización, es recomendable que planteemos en casa un planning que incluya todas las actividades que se tengan que realizar a lo largo de, por ejemplo, una semana. Pueden ser de todo tipo: limpieza, ocio, cuestiones laborales, actividades de los niños, etc.

Con este horario hecho, sabremos cuándo debemos realizar cada actividad y cuánto nos quitará de nuestro día, con lo que no perderemos el tiempo intentando abarcar muchas cosas para, al final, quedarnos en nada. Créenos, ¡es un método infalible!

 

¿Y si ahorramos todo lo posible?

En una familia numerosa, cada mes se convierte en una cuesta que, muchas veces, superamos con muchas dificultades y sacrificio. Es de vital importancia, por tanto, ser conscientes de en qué gastamos nuestro dinero; si sabemos qué reduce nuestro presupuesto de forma significativa, podremos analizar qué es necesario y qué imprescindible. Con esto en mente, veamos algunos aspectos en los que podemos ahorrar casi sin darnos cuenta.

 

Comida

¿Sabías que los hogares españoles tiran, aproximadamente, el 20% de la comida a la basura? Sobre todo, verduras y frutas. Ante estas cifras, el consejo es claro y sencillo: hay que elegir bien a la hora de hacer la compra. Esto implica:

  • Crear una lista en la que se refleje qué necesitamos comprar. De esta forma, evitaremos las tentaciones.
  • Comprar alimentos de temporada, más baratos, y aprovechar las ofertas que ofrezcan los supermercados.
  • Congelar una parte de la comida preparemos si vemos que va a ser demasiado. ¡Mejor congelada que expuesta en la nevera para que se ponga mala!
  • Evitar alimentos que, además de poco saludables, cuentan con un precio bastante superior a la media, como, por ejemplo, la bollería industrial.

 

Transporte

Una buena forma de ahorrar es utilizar el transporte público en lugar del coche, ya que, además, hay descuentos para familias numerosas en bastantes comunidades autónomas. Además, recomendamos caminar todo lo que podamos cuando se trate de distancias cortas; ahorraremos y también nos pondremos en forma. ¡Son todo ventajas!

  

Agua

A la hora de utilizar el agua, podemos tener en cuenta estos consejos: aprovechar toda la capacidad de la lavadora y del lavavajillas antes de usarlos; tirar los papeles a la papelera y no al váter; cerrar los grifos mientras nos lavamos los dientes o nos enjabonamos; ducharnos y no darnos baños.

 

Ropa y material escolar

A todos nos gusta estrenar cosas nuevas, pero no siempre es una necesidad. Cuando los niños necesiten ropa, es recomendable que esperemos a las rebajas para conseguir las prendas que nos hacen falta al mejor precio. Y, cuando tengamos que comprar cosas para el colegio, cuando ya los más pequeños no lo sean tanto, podemos aprovechar material que tengamos en casa para no dejarnos grandes cantidades de dinero que podemos destinar a otras cosas más importantes.

 

¿Por qué no te beneficias de las ayudas?

Las familias numerosas pueden beneficiarse de distintas ayudas y descuentos. Para ello, por lo general, se necesita un documento oficial que certifique que perteneces a una familia numerosa (general o especial), el libro de familia, DNI de los padres, foto familiar y justificante de empadronamiento. Entre las diferentes ayudas, destacan:

  • Bonos sociales. como los referentes a la luz y el agua, así como las importantes deducciones fiscales a la hora de hacer la declaración de la renta.
  • Viajes en avión. Ahorrarás hasta un 5 o 10% en vuelos nacionales en los billetes de cada miembro de la familia.
  • Viajes en bus y tren. Podrás disfrutar de descuento en RENFE y transporte por carretera: un 20% para familias numerosas generales y un 50% para las especiales.
  • Centros culturales y museos. Las familias numerosas, independientemente del tipo, cuentan con una reducción en el precio de las entradas a museos y centros culturales.
  • Educación. Las familias numerosas tienen preferencia a la hora de recibir las becas y en los procesos de admisión en los diferentes colegios. Además, pueden estar exentas de pagar tasas y precios públicos.
  • Si se contrata a una persona para realizar una labor de apoyo en casa, se contará con un descuento del 45% de la cotización a la Seguridad Social. La única condición, en el caso de las familias numerosas generales, es que trabajen ambos padres.