Las anomalías de los genitales más comunes en los niños

Durante la infancia, los niños pueden experimentar diferentes trastornos en la zona genital. Por lo general, estos afectan al 3-10% de los niños, por lo que no debemos preocuparnos si nuestro hijo padece una de estas anomalías.

Hoy, os hablamos de estos principales trastornos. De esta forma, sabremos cuáles son sus síntomas y cómo debemos actuar ante cada caso. ¡Tomad nota, que es muy importante!

 

bebé, anomalías, trastornos, genitales, fimosis, zona íntimaFimosis

La fimosis es uno de los trastornos más comunes. El prepucio no se puede retraer, lo que impide que el glande quede al descubierto por completo. Los síntomas principales son dolor al intentar retraer el prepucio de forma manual e inflamación del prepucio y del glande.

La fimosis puede ser de dos clases: congénita o adquirida. Es congénita si se manifiesta desde el nacimiento del bebé y adquirida si se produce a causa de una infección. En el primer caso, no es necesario realizar ninguna intervención quirúrgica ni establecer un tratamiento; es completamente normal. Sin embargo, en el segundo caso es importante realizar una circuncisión a través de una pequeña operación.

¡Nota! Por lo general, la abertura del prepucio se dilata con el paso del tiempo, permitiendo la salida del glande. 

 

Parafimosis

La balanopostitis es una infección que provoca la inflamación del grande y del prepucio. Normalmente, es consecuencia de la fimosis: la orina y el esmegma (secreción genital) se acumulanbebé, anomalías, trastornos, genitales, fimosis, zona íntima entre la piel del prepucio y, por este motivo, se infecta. Entre los síntomas principales, destacan los edemas en la piel y molestias al orinar. El pus en el interior de la abertura del prepucio es también un indicio. 

El tratamiento de esta anomalía se determina en función de las características de cada caso. No obstante, suele bastar con lavar la zona genital, con agua templada, varias veces cada día. También se puede utilizar un paño de agua caliente, siempre esterilizado.

 

Criptorquidia

La criptorquidia es un trastorno genital por el que uno o los dos testículos no bajan al escroto. Por el contrario, se quedan en la zona inguinal o en el abdomen.  Por lo general, los testículos descienden al escroto a lo largo del primer año.

Sin embargo, si, alcanzados los dos años de vida, no lo han hecho, es importante realizar una intervención quirúrgica. De no hacerlo, en el futuro, el niño podría padecer problemas de esterilidad. La temperatura del cuerpo en estas zonas es elevada para los testículos, con lo que se podría producir una alteración en la formación de los espermatozoides.

 

bebé, anomalías, trastornos, genitales, fimosis, zona íntimaHipospadias anterior

La punta de la uretra por donde se expulsa la orina, denominada “meato”, no está en el extremo del glande, donde debería. Debido a esta anomalía, se produce una desviación de la orina de los niños.

Para tratar este trastorno, se realiza una sencilla intervención quirúrgica, en la que se reconstruye la punta de la uretra. Sin embargo, no es de extrema urgencia ni gravedad. La operación se puede posponer hasta que el peque cumpla un año y medio.