El hipo en bebés

Todo el mundo le da demasiada importancia al hipo. Es una sensación molesta, es cierto, pero al fin y al cabo no es para tanto. Es un mal rato que, incluso tu bebé, puede experimentar. Desde que son fetos sufren este tipo de contracciones momentáneas. Pero ¿por qué surge? ¿Cómo podemos pararlo?

Hoy os hablaremos sobre las causas, consecuencias y soluciones para el hipo en bebés, para que todos los padres vayan prevenidos a la hora de la verdad. ¡Manos a la obra!

 

hipo, bebés, alimentación, diafragma, biberón, pecho, toma, leche, lactancia¿Qué es el hipo?

Es un trastorno muy común debido a la irritación del diafragma, músculo fundamental para la respiración. Este se contrae de manera repentina, así como todos los músculos del sistema respiratorio y las cuerdas vocales, produciendo un sonido ahogado muy característico. Normalmente, los efectos el hipo desaparecen rápidamente y el bebé recupera el aliento normal.

Como hemos dicho antes, el hipo aparece en mamíferos pero, más en particular, en los bebés lactantes. Prácticamente, todos ellos padecen este pequeño trastorno, sobre todo en el sexto mes de vida. Esto se debe a su adaptación al entorno y el desarrollo de su organismo.

 

hipo, bebés, alimentación, diafragma, biberón, pecho, toma, leche, lactanciaCausas del hipo 

Lo más normal es que aparezca el hipo debido a una indigestión o tener el estómago lleno. Esto produce la contracción del diafragma que produce el hipo. Otras consideraciones a tener en cuenta son las siguientes:

● Que la comida estuviera demasiado caliente

● Que el bebé comiese muy rápido (se recomienda un tiempo medio de 20 minutos para la ingesta)

● La posición del bebé al comer

● Introducción de bebidas gaseosas en la dieta del bebé y alimentos que procedan a irritar su sistema digestivo

● No haber esperado al eructo del bebé antes de acostarlo en la cuna

Por otro lado, puede surgir debido al poco desarrollo de su sistema nervioso, el mismo que dirige el sistema motor del cuerpo. Diversas alteraciones de sus nervios pueden originar movimientos involuntarios de músculos como el diafragma en este caso. Su sistema digestivo también puede verse poco desarrollado. Esto puede provocar cambios en la temperatura corporal del bebé y reflujos, un malestar que afecta al esófago y los músculos de la digestión que a largo plazo puede solucionarse.

Hay que añadir, además, que el hipo también se produce por el uso de tetinas poco adecuadas para su alimentación, que propulsa la entrada de aire mientras se alimentan. A la hora de darle el pecho, pueden agarrarse mal al pezón y favorecer, de esta manera, la aspiración.

 

hipo, bebés, alimentación, diafragma, biberón, pecho, toma, leche, lactanciaSoluciones contra el hipo

Normalmente, los bebés no lloran con el hipo. Sin embargo, resulta una sensación que, si ya es incómoda para los adultos, también lo es para el recién nacido. Para cuando lo escuches hipar, hay varios remedios:

● Se recomienda alimentar al bebé cuando esté tranquilo y no tenga tanta hambre. De esta manera irá más lento a la hora de comer y evitará que inspire aire.

● Al amamantarlo, hay que asegurarse de que el recién nacido está agarrando bien el pezón. Resulta ideal hacer turnos para darle el pecho. Interrúmpele, deja que tome aire y que vuelva a hacerlo.

● Al terminar de darle el pecho, mantén al bebé en posición vertical para que pueda eliminar el aire.

● Los cambios de temperatura, por otro lado, pueden provocar el hipo. Es fundamental evitar las corrientes de aire y resguardarse para alimentarlo. Además, el bebé tiene que ir bien abrigado para evitar dichos cambios bruscos en el ambiente.

● En caso de que persista el hipo, es recomendable llevarle al pediatra para averiguar si hay algún problema en el sistema digestivo, respiratorio o nervioso del bebé.