Cómo introducir las verduras en la alimentación de los bebés

Los bebés, en su desarrollo, deben ampliar su dieta alimentaria. Se dice que a partir del sexto mes deben probar nuevas comidas, y entre ellas está la temida por muchos de los pequeños: las verduras. No obstante, y aunque ellos no lo sepan, esta clase de alimentos ofrecen todos los nutrientes y vitaminas que necesitan para su crecimiento.

En este artículo os ofrecemos toda la información necesaria sobre ellas, cuáles son las más recomendables y una serie de consejos para dárselas al bebé. ¡Será coser y cantar!

 

verduras, alimentación, bebé, leche¿Qué aportan las verduras a nuestro cuerpo?

Sin ir más lejos, las verduras nos ofrecen un aporte vitamínico inmenso: vitamina C, ácido fólico para prevenir la anemia y provitamina A entre otras, ideal para mantener la piel cuidada y brillante. Su fuente de antioxidantes ayudará al bebé a eliminar toda toxina de su cuerpo, manteniendo su organismo limpio y purificado.  

Estas, aparte de las frutas, aportan una generosa cantidad de agua para mantenerle hidratado. Apenas contiene grasas ni proteínas, por lo que debería ser un alimento complementario a su dieta principal: la leche. Y además, se puede combinar con todas las comidas posibles. ¡Para que no te preocupes en cómo disimularlo en el plato!

 

Las primeras verduras del bebé

Las verduras nos proporcionan infinidad de beneficios, de eso no hay duda. Sin embargo, hay que ir introduciéndolas poco a poco, porque hay determinadas clases de vegetales que pueden resultar irritantes y molestas para el bebé o, incluso, producir alergias.

Por lo general, la patata, el puerro y la zanahoria son fundamentales en su dieta, por su sabor y textura suaves. Las judías también son aconsejables, así como el calabacín y la calabaza, nuevos sabores que adaptarán con facilidad en sus comidas diarias.

Por otra parte, hay que tener cuidado con verduras que puedan producir muchos gases, como la coliflor, las coles y sus derivados. Así como las más alérgenas, como el tomate, la remolacha, los espárragos y las de hoja verde oscuro (acelgas y espinacas) Estos podrían provocar úlceras y erupciones en el bebé, además de causarle rechazo. Digamos que la edad recomendada para ofrecerles este tipo de vegetales sería a partir del año o los 18 meses, dependiendo de cómo lo tolere en una primera toma de contacto.

 

verduras, alimentación, bebé, leche¿Cómo las preparo?

Los bebés aceptarán las verduras más fácilmente con los purés. ¡Justo como con las frutas! De esta manera no pierde valor nutritivo y disfrutarán mucho más de una textura y sabor deliciosos. Os recordamos los pasos a tener en cuenta para que el puré quede al gusto.

● Primero hay que elegir las verduras. Os recomendamos que sean frescas, recién compradas y a temperatura ambiente. Si se guardan en el frigorífico, pueden perder muchas de sus vitaminas y fácilmente se pudren.

● Después de haberlas pelado y lavado, hay que cocerlas para poder hacerlas puré. Aprovechad el agua hirviendo para verterlas, de esta manera no perderán sus propiedades.

● El pasapurés antes que la batidora. Esta deja una textura mucho más cremosa, por lo que el bebé la tomará con mucho más placer. Con la batidora pueden quedar tropezones y complicar la ingesta.

● ¡Olvidad la sal! Ellos no necesitan probarlo a edades tan tempranas, debido a que sus órganos son tan pequeños todavía que no pueden asimilarlo. Aplicad la misma regla con el azúcar.

● Un paso fundamental para mejorar la mezcla es darle un toque de aceite de oliva para suavizar la textura y el sabor. Es el ingrediente estrella en nuestra dieta mediterránea, ¡hay que inculcársela desde bien pequeñitos!

 

verduras, alimentación, bebé, lecheOtros consejos

Estos son los pasos principales para hacer un puré delicioso para nuestro bebé. No obstante, tened en cuenta estas indicaciones adicionales:

● El puré siempre templado, ni muy frío ni muy caliente.

● Utilizad una cuchara de goma para que la acepte mejor.

● Si el puré se ha hecho con ingredientes frescos y naturales, se puede congelar. No obstante, en determinadas cremas puede que pierdan la textura inicial.

● No obliguéis a vuestro bebé a darle la papilla. Es un proceso de asimilación constante, por lo que armaos de paciencia.

● Es recomendable introducir las verduras poco a poco y en pequeñas cantidades para ver cómo las va tolerando el bebé.