Consejos para estimular al bebé dentro del vientre materno

En tu interior albergas una vida que está creciendo y pronto saldrá a la luz. Pero no solo eso. Durante estos nueve meses de gestación, el bebé perfeccionará sus sentidos de manera constante. Por esta razón, debemos actuar para asegurar su perfecto desarrollo enseñándole el mundo desde dentro y ofrecerle nuevas experiencias sensoriales.

En este artículo os mostraremos útiles consejos para estimular al bebé dentro del vientre materno. Para ello, hay que atender a los cinco sentidos. Tomad nota y seguidnos en este viaje.

 

estimular, bebé, vientre, madre, vientre materno, sentidos, vista, oído, gusto, olfato, tactEl oído

Junto el tacto, es el sentido que antes se forma. Al quinto mes, el bebé percibirá sonidos del exterior, los latidos de su madre y, más importante, su voz. Este la reconocerá y podrá sentir cómo esta se comunica con él a través de dulces palabras.

Mantener el contacto con él es un requisito indispensable para desarrollar su oído. Habladle sin vergüenza y estimuladle leyéndole pequeños cuentos, siempre proyectando la voz hacia la barriga. La música también es una aliada para el bebé: la música clásica, en particular, le produce bienestar y fomenta la actividad cardíaca del feto, conectando tanto con los sonidos como con su madre.

 

La vista 

La formación de los ojos en el bebé es un proceso que empieza en la cuarta semana de embarazo, con la creación de los surcos en su rostro. No será hasta la vigésima semana cuando los ojos estén completamente desarrollados, pero no se abrirán hasta pasadas otras cuatro.

En el séptimo mes de embarazo, el bebé sabrá distinguir la luz de la oscuridad. Enfocando un haz de luz hacia el feto, la criatura reaccionará con pequeños movimientos o patadas, signo de que puede percibir el cambio. Juega con la luz sin preocupaciones: el bebé no se lastimará. Eso sí, asegúrate de hacerlo en momentos en los que esté despierto. No interrumpas su ciclo de sueño. 

 

estimular, bebé, vientre, madre, vientre materno, sentidos, vista, oído, gusto, olfato, tactEl gusto y el olfato

A partir del sexto mes, el gusto y el olfato ya se habrán desarrollado en el feto de forma paralela. Es un proceso que llevan a cabo a partir de la duodécima semana, y conseguirán diferenciar los alimentos dulces de los salados, así como lo que es amargo y ácido. Gracias al cordón umbilical, conducto por el que reciben los nutrientes de las comidas, conseguirán apreciar este avance.

La madre puede permitirse algún que otro capricho. Enseñadle sabores que os gusten y variad el menú para que se familiaricen con determinados alimentos. Esta forma de acostumbrarles hará que en el futuro no tengan tantos problemas para asimilar ciertas comidas problemáticas. Aunque todo sea cuestión de gustos, ¡probar cosas nuevas no mata a nadie!

 

El tacto

Dentro del vientre, el bebé perfeccionará el sentido del tacto y estará listo para comunicarse con su madre. A partir de la quinta semana recibirá pequeños estímulos; a la séptima, serán sensaciones, al principio alrededor de la boca y, tiempo después, en las extremidades y genitales.

Participad con el bebé, ellos apreciarán vuestros toques y caricias al vientre. Frotadlo, responded con dulzura y jugad a buscaros. Al más mínimo toque, él reaccionará.

 

Otros consejos

Una vez sabemos los entresijos del feto y sus respuestas, es hora de tomar en consideración unas cuantas sugerencias:

● Jugar con el calor corporal. Si tienes las manos frías o más tibias, ponedlas en el vientre para que ellos sientan los cambios de temperatura.

● Usar aceites aromáticos para acariciar al feto. Esto supondrá un doble beneficio, tanto al bebé que lo apreciará como a vosotras, que entrenaréis vuestra piel para evitar las estrías después del parto.

● Consumir productos ricos en DHA (ácido docosahexaenoico). Son ricos en grasas omega 3 que podemos encontrar en la leche materna. Así favoreceréis el desarrollo neuronal del bebé durante sus primeros años de vida. Lo encontraréis en el pescado azul, en frutos secos como las almendras y las nueces y en la yema del huevo.