Consejos para facilitar el destete

Uno de los momentos más complicados de la crianza es el destete. Cuando el bebé puede obtener todos los nutrientes mediante papillas y otros alimentos, significa que ya podemos ir planteando dejar el pecho de forma progresiva. Es una decisión de la mamá y el bebé pero no obstante, la reacción del pequeño puede dificultar el proceso.

Por ello, debemos cumplir con unas pautas convenientes para que abandonar el pecho sea un proceso llevadero. Aquí os dejamos una serie de consejos para facilitar el destete infantil. ¿Estáis listos?

 

¿Cuándo comienza el proceso?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef, se recomienda la lactancia materna en exclusiva hasta los 6 meses. Cuando pase este periodo de tiempo, se podrá alternar la alimentación. Con la introducción de papillas, cereales y otros alimentos en su dieta, podremos variar los horarios, y mantener solamente la dosis matinal y nocturna.

Este proceso se extenderá hasta la salida de los dientes y, por ende, que pueda probar nuevas comidas de forma continuada. Sin embargo, depende de las necesidades del niño y de la madre. Este proceso debería durar hasta los dos años, cuando, en teoría, el pequeño pueda llevar una alimentación completa a través de sólidos.

 

¿Quién toma la decisión?

El destete, al fin y al cabo, es una cuestión de iniciativa. Y, en la mayoría de los casos, es la madre quien toma la decisión de reducir las dosis de leche materna. Esto no debería significar, para el bebé, que se rompa el vínculo que han creado la madre y él. Por eso, debe ser un proceso natural y lento, sustituyendo esta forma de unión por otra, como el ocio. Leer cuentos, cantar, disfrutar juntos del aire fresco… ¡cualquier solución de este tipo es posible!

Durante este proceso hay que ser pacientes y mantener la calma. No se recomienda, bajo ninguna circunstancia, que la madre deje de darle el pecho de golpe. Solo trae dientes, dentición, consejos, aliviar, mordedores, fruta congelada, chupetes, masajesinconvenientes para ambos: el niño podría generar un trauma en base a eso, mientras que ella podría sufrir una obstrucción de los conductos de leche e, incluso, una infección en los senos.

No obstante, es posible que el bebé se adelante a la madre y que, poco a poco, deje de interesarse por el pecho. Con la llegada de papillas que sean de su gusto y otros alimentos, el proceso de destete puede acelerarse; sobre todo cuando, cumplido el año, se vuelven más distraídos e inquietos.

 

Vías para el destete

Antes de nada, debemos informar a nuestro pediatra de la decisión que queremos tomar sobre dejar de dar el pecho. Atender a sus indicaciones será lo mejor que podemos hacer, por el bien del niño. A raíz de sus recomendaciones, podemos optar por dos formas de continuar dándole leche, dejando atrás el pecho:

Extracción de leche

Una posibilidad es aprender a sacar la leche y dársela en su biberón. De esta forma, disfrutará de sus beneficios sin necesidad de darle el pecho. No obstante, debemos tener cuidado en el procedimiento para extraerla.

Primero nos lavamos bien las manos y esterilizamos los objetos que vayamos a utilizar para sacar y guardar la leche. Para hacer la tarea más sencilla, podemos optar por un sacaleches. En función de las necesidades de la madre, se puede escoger entre un sacaleches manual o eléctrico. La matrona será quien mejor nos asesore en este aspecto.

Para conservar la leche materna, podemos utilizar las bolsas de almacenamiento de Dr. Brown’s. Tienen un doble cierre con el que mantener hermética la leche y, por ende, para adaptarla fácilmente. Es recomendable que, en dichas bolsas, se indiquen la fecha de extracción y la cantidad de leche en la parte superior, donde ya viene indicado.

La leche puede llegar a conservarse a temperatura ambiente durante 6 y 8 horas, y hasta dos semanas dentro del congelador. A la hora de descongelarlo, debemos dejarlo en el exterior durante 4 horas. Por otro lado, no se recomienda volver a congelar lo que sobre. De hecho, cuanto más justa sea la cantidad de leche que guardemos en la bolsa, mejor, porque no sabemos qué cantidad va a poder tomar el bebé.

Leche de continuación

La leche seguirá siendo fundamental en la alimentación del bebé. Si decidimos dejar de darle el pecho, podemos contar con fórmulas de leche infantil adaptadas y nutricionalmente completas para su desarrollo.

Capricare, nuestra marca de confianza, ofrece la primera fórmula de continuación a partir de la leche de cabra. Por su proceso de secreción es más similar a la leche materna. Su elaboración es sencilla y natural. A diferencia de la mayoría de otras marcas que descomponen la leche, Capricare utiliza la leche entera de cabra y sólo añade las vitaminas y nutrientes necesarios para cumplir con las necesidades del bebé.