¿Ha coincidido que estas embarazada con la llegada del verano?.
Lógicamente estar embarazada no es un impedimento para disfrutar del mar o la piscina y combatir el calor, pero sí debemos tener más cuidado.
¿Nunca os habéis preguntado si es bueno tomar el sol durante el embarazo?
Como ya sabemos, el sol aporta numerosos beneficios como la activación de la vitamina D, contribuyendo a una mejor absorción del calcio fortaleciendo los huesos.
Si el sol nos aporta diferentes beneficios en nuestro organismo, el bebé también se está beneficiando de ellos, pero… ¿Por qué debemos tener más cuidado a la hora de tomar el sol?
Durante el embarazo es habitual que se produzcan manchas en la piel y sobre todo en la cara, debido al aumento de estrógeno y progesterona y a los cambios hormonales que se producen durante el embarazo. Estas pueden intensificarse si nos da el sol, pudiendo quedar la piel manchada y costando muchísimo hacerlas desaparecer.
¿Podemos evitar de alguna forma estas manchas cutáneas?
Podemos prevenirlo evitando la exposición solar sin filtros solares que nos protejan.
Usar protector solar es fundamental para no intensificarlas o que se hagan difíciles de desaparecer, por lo que deberás llevar la piel bien protegida frente a los rayos solares tanto en verano como en invierno. Además de evitar éstas, debemos procurar golpes de calor y quemaduras en la piel. Usar gorros de ala ancha ayudan a tener una mayor protección de zonas sensible como es la cara.
¿Cómo tomar el sol durante el embarazo?
–Usa protector solar. SPF+30 mínimo para el cuerpo y mayor protector para la cara SPF 50.
–Evita las horas centrales del día, de 12:00-16:00, en la que los rayos del sol son más fuertes.
–No estar muchas horas expuestas al sol, permanecer la mayor parte a la sombra. El aumento excesivo de temperatura puede afectar al feto.
-Intenta no tumbarte boca arriba en la toalla, ya que no se recomienda sobre todo al final del embarazo. Es mejor que uses sillas de playa o pasees por la orilla, te mantendrás más fresca y andar te ayudará a tener una mejor circulación.
-Una hidratación adecuada también favorece a una mejor circulación sanguínea y ayuda a mantener la temperatura corporal, esto permite combatir el calor y mantener un embarazo saludable, sobre todo en ésta época del año.
Como conclusión, podemos tomar el sol durante el embarazo pero con moderación y precaución.
El verano sólo acaba de empezar y estar embarazada no nos impedirá disfrutar de él.
¿Preparada para disfrutar a tope en partida doble?
¿Algún consejo que nos pueda ayudar?
¡CUÉNTANOS!