Estás embarazada. Vas a ser mamá y tienes un montón de preocupaciones rondándote en la cabeza. “¿Cómo será mi bebé?” “¿Tengo todo lo que necesito?” “¿Y si no me coge el pecho?” son dudas muy frecuentes que nos asaltan durante el embarazo mientras nos tomamos un té, vemos la tele o estamos en la ducha. La lactancia materna es una de las mayores preocupaciones de las nuevas mamás y a veces se convierte en un deseo frustrado poder amamantar a nuestro bebé por problemas como la irritación de los pezones, grietas o incluso mastitis.
Al margen de la decisión de cada madre, lo cierto es que la lactancia materna, sobre todo durante la cuarentena, protege al bebé contra enfermedades e infecciones, a la vez que fortalece su crecimiento y desarrollo. Pero cuando llega la hora de alimentar al bebé, muchas madres se encuentran con problemas en las mamas que a menudo les hace abandonar la lactancia o resistir heroicamente a un intenso dolor. Sin embargo, cualquier dolor agudo, que se prolongue más allá de los quince primeros días o que no se limite al inicio de la toma, debe ser atendido.
Este dolor se debe en muchos casos a una mala posición del bebé al amamantar. Colocar incorrectamente al niño puede ocasionar problemas como grietas en el pezón, ya que si la postura no es la correcta, es probable que el bebé no se enganche bien y lesione el pecho. La mejor forma de prevenir las grietas es dar el pecho al bebé de la forma correcta.
Sin embargo, una vez producidas las grietas, las pezoneras son una solución cómoda y sencilla que te permitirá seguir con la lactancia de tu bebé sin problemas. A muchas madres y matronas no les gusta la mayoría de las pezoneras del mercado porque son demasiado gruesas, pero nosotras hemos dado con un tipo muy sorprendente: las pezoneras de silicona de Dr.Brown’s. Están hechas de silicona médica, pero a diferencia del resto, son realmente finísimas lo que permite un acople total al pecho como una segunda piel.
Las pezoneras son un producto muy útil, aunque desconocido, que protegen tus pechos durante la lactancia y ayudan a tomar forma a los pezones planos o invertidos. El pico de la pezonera contiene múltiples agujeritos para que la leche fluya suavemente. Además poseen una forma redondeada que permite el contacto directo piel con piel entre la nariz del bebé y tu pecho, para que sienta tu piel y tu olor. Se venden en packs de dos y pueden lavarse en la bandeja superior del lavavajillas.
Hay muchos mitos alrededor de las pezoneras, sobre todo en relación al tiempo de uso. Según la Asociación Española de Pediatría, aunque están recomendadas para uso temporal, no hay inconvenientes en utilizar pezoneras por un tiempo prolongado mientras los senos se curan. Después, es mejor retirarlas poco a poco y cuando tu bebé ya esté saciado, hacia la mitad o el final de la toma.