Consejos para cuidar los pechos durante la lactancia

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la alimentación exclusiva con leche materna durante los seis primeros meses. Por este motivo, es importante que, durante el período de lactancia, cuidemos nuestros pechos. Los pezones o senos pueden agrietarse o irritarse, convirtiéndose este momento tan bonito en un auténtico dolor.

Cuando amamantamos a nuestros peques, experimentamos numerosos cambios, también en los pechos. Por ello, debemos llevar a cabo una serie de rutinas para que la lactancia no suponga un problema. Hoy, os contamos algunos trucos que hay que tener en cuenta para cuidar los pechos durante la lactancia.

 

lactancia, leche materna, cuidados, pechos, senos, pezonesEl sostén

Mientras dure la lactancia, tenemos que procurar utilizar un sostén adecuado, no uno corriente. Es importante que el sujetador no tenga aros para evitar la congestión de los pezones. Asimismo, es recomendable que la talla de éste sea una o dos más que lo habitual. De esta forma, no apretará y los pechos no sufrirán.

En cuanto al material, lo ideal es que esté fabricado con los tejidos naturales y lo lavemos con productos no muy agresivos. Así, nos aseguraremos de que los senos no se irriten.

 

Las tomas

En cada toma, es importante que el bebé vacíe el pecho entero para que el tejido se relaje. Por tanto, debemos asegurarnos de que la posición sea la correcta. Para ello, podemos utilizar un cojín de lactancia. Con él, la alimentación es en ángulo, lo que puede ayudar a la digestión y reducir el reflujo. Además, tendremos una superficie más amplia, con lo que el bebé puede colocarse mejor para realizar la toma.

Además, no tenemos que olvidarnos de variar los pechos en cada toma. Si no lo hacemos, estos se colapsarán, lo que dificultará la lactancia. Si es necesario, podemos ayudarnos de un sacaleches manual para que el proceso sea más sencillo.

 

lactancia, leche materna, cuidados, pechos, senos, pezonesLa hidratación

Tenemos que mantener los pechos hidratados durante la lactancia. ¡Pero no tenemos que hacerlo de la forma que pensamos! No hay que utilizar ningún producto de cosmética ni cremas hidratantes. Bastará con que utilicemos la leche que nosotras mismos producimos. Ya sabéis que la leche materna tiene propiedades buenísimas, y una de ellas es que es una buena cicatrizante.

  

La higiene

No es necesario que nos obsesionemos con la higiene de los pechos por ser mamás lactantes; podemos continuar con nuestros hábitos de siempre. De hecho, ¡es lo recomendable! Si abusamos del jabón o pomada, los pezones se pueden irritar, lo que provocará la aparición de grietas en el pecho.

¡Consejo! A la hora de lavarlos, lo recomendable es que lo hagamos con agua. Esto bastará para eliminar las bacterias y evitar posibles infecciones.

 

Los ejercicios

Si queremos evitar la caída del pecho, es importante que hagamos ejercicios al acabar la lactancia. También podemos hacer natación o pilates para que los senos se mantengan firmes.

Durante la lactancia, los pechos crecen, pero al acabar, vuelven a su aspecto normal. Por ello, es importante realizar estos ejercicios para evitar la aparición de flacidez o estrías.

 

lactancia, leche materna, cuidados, pechos, senos, pezonesLa protección

Si, pese a los consejos anteriores, se forman grietas en los senos, podemos recurrir al uso de conchas protectoras y pezoneras. Las conchas protectoras protegen los pezones agrietados y promueven la cicatrización. Son muy discretas, por lo que podemos utilizarlas bajo la ropa. Las pezoneras, por su parte, protegen los pezones durante la lactancia. Tienen 13 orificios, por lo que la salida de la leche es de lo más natural.