La alimentación de los bebés en verano

Con la llegada del verano, debemos llevar a cabo una selección de prioridades para sobrevivir a los meses de calor. Y entre ellas se encuentra la alimentación. Seguir una dieta fresca, variada y equilibrada nos ayudará a mantenernos frescos. Los más pequeños de la casa no son una excepción. Ellos, más que nunca, merecen un verano lleno de sabor y sin preocupaciones.

¿Os gustaría saber qué alimentos son idóneos para los bebés en verano? Entonces no os perdáis este artículo. ¡Buen provecho!

alimentación, bebés, verano, consejosLa alimentación en los recién nacidos

A edades tan tempranas, la leche materna será su fuente de alimentación esencial para los días de verano. Le aportará los nutrientes y el agua suficiente para mantenerse hidratado. Esto implica, por supuesto, que la madre debe estar bien servida de líquidos.

Aunque la leche materna es el mejor alimento para el bebé, también es válido utilizar leche de continuación. En este caso, sin embargo, debemos elegir aquella que más se asemeje a la leche materna en cuanto a sus componentes. El biberón se encargará de alimentar al bebé, y durante la época estival hay que esterilizarlo, sobre todo cuando estáis fuera de casa. El calor y la humedad favorecen la presencia de gérmenes que pueden afectarle, produciéndole enfermedades estomacales como la gastroenteritis.

 

alimentación, bebes, verano, consejos¿Probando nuevas experiencias culinarias?

 Paso a paso, nuestro bebé irá ampliando su dieta alimentaria. A partir de los seis meses, saboreará nuevas comidas y las probará tanto en forma de puré como en pequeños bocaditos. ¿Y cuáles son exactamente los mejores alimentos?

● Fruta de temporada. No hay nada más refrescante que el sabor de la fruta fresca. ¡Y podemos servirla de muchas maneras! En trocitos pequeños, en yogur, leche o en una macedonia. Igualmente, debemos tener en cuenta que, a tan temprana edad, debemos evitar determinadas frutas alérgenas típicas del periodo estival como el melón, el kiwi o el melocotón. La opinión de un pediatra será decisiva para la ingesta de este tipo de frutas en verano.

● Verduras. Una buena dosis de verduras mantendrá a nuestro bebé con energía. Su alto contenido en vitamina C y ácido fólico mantendrá su piel cuidada ante la amenaza solar y para prevenir las defensas bajas y sus enfermedades posteriores. Al ser tan pequeños todavía, han de probar sabores suaves como el de la zanahoria o las judías. La patata y el puerro le proporcionará una importante fuente de proteínas, ¡y el calabacín o la calabaza quedarán sabrosas en un delicioso puré!

● Pescado: Resulta imprescindible ofrecerle pescado al menos tres veces a la semana, gracias a su importante aporte de minerales, bajo nivel calórico y vitamina B, ideal para el desarrollo mental de nuestro bebé. Hay que empezar por los pescados blancos, pues son más suaves y tienen menos contenido en grasas. La merluza y el lenguado son, entre otros, los preferidos por los pequeños.

 

alimentación, bebes, verano, consejosConsejos para llevar a cabo una rutina alimentaria sana

Ahora que sabemos qué platos son ideales para el bebé, debéis apuntar unos cuantos consejos para que la alimentación sea sana y llevadera durante la época estival. ¡Vamos allá!

● Aunque cambie la época del año, los horarios deben cumplirse con la mayor precisión. De esta manera comprobamos que el bebé mantenga su apetito a las horas indicadas. Las comidas deben ser tranquilas y lentas, para que pueda asimilar los platos y mastique bien.

● El desayuno es la comida más importante del día. Aseguraos de que se alimenta como un rey con buenas dosis de frutas, cereales o leche, dependiendo de su edad.

● Si vais a comer fuera, tened cuidado. La playa es un lugar paradisíaco, y un chiringuito, de lo más tentador. Pero los bebés deben evitar toda comida que se procese dentro. Las frituras son indigestas y perjudiciales a tan temprana edad. ¿Su comida? Preparada de casa y guardada en un bolso térmico para mantener su frescura.

● Antes de daros un chapuzón en el agua, comprobad los tiempos de digestión. Un mínimo de dos horas serán necesarias para evitar problemas estomacales, como los cortes de digestión.