Todo lo que necesitas saber sobre el tratamiento de reproducción asistida por la Seguridad Social

¿Os estáis embarcando en la maravillosa aventura de ser padres? Tener un hijo es un momento que cambia la vida. No obstante, puede llegar a ser tarea difícil en determinados casos, y este deseo puede verse condicionado si el embarazo no se produce de forma natural.

Para ello, podemos optar por otra vía diferente: la reproducción asistida. Un proceso que, todavía para muchos, es desconocido. ¿Queréis saber los pasos a seguir para acceder a este tratamiento? Este artículo resolverá todas vuestras dudas. ¡Adelante!

 

¿En qué consiste la reproducción asistida?

Es un conjunto de técnicas y procedimientos médicos que ayudan a impulsar el embarazo cuando se localizan problemas de fertilidad, tanto masculinos como femeninos. Y no solo eso, también ayudan a madres solteras y parejas del mismo sexo a tener hijos. Existen dos formas de reproducción asistida:

● Inseminación artificial. Es, ni más ni menos, que la inserción de una cantidad de espermatozoides optimizados para fecundar. De esta forma, las probabilidades de quedar embarazada son mayores.

● Fecundación in vitro. En esta técnica, se une directamente el óvulo con el espermatozoide. Para ello, los ovarios necesitan un proceso previo de estimulación para la creación de óvulos hábiles para ser fecundados más fácilmente.

 

¿Cómo acceder a la reproducción asistida?

Desde la Seguridad Social es la forma más accesible y barata para poder quedarse embarazada de forma alternativa. Para ello, no obstante, debemos tener en cuenta una serie de requisitos que deben reunir los padres.

● La edad es un factor condicionante para poder quedarse embarazada. El límite en mujeres son los 40 años; en hombres, 55.

● Los matrimonios con hijos no pueden acceder a este tratamiento, a no ser que uno de ellos naciese con problemas graves o si uno de los padres tuviese descendencia fuera de la relación.

● Antes de llevar a cabo la reproducción asistida, ambos padres se someterán a pruebas de fertilidad para verificar el problema en concebir.

● En algunos casos, se puede utilizar el esperma congelado del cónyuge. No obstante, en casos de que este dificulte el procedimiento, se podrá acceder a bancos de donantes privados.

● En determinados centros públicos, cuando falla un ciclo de fertilización, se vuelve a intentar de manera seguida. No obstante, en otros tendrá que volver a la lista de espera.

● Los pacientes con enfermedades potenciales a ser hereditarias, como la hepatitis C o en VIH, deberán asistir a laboratorios preparados para cumplir con las especificaciones de cada uno de ellos. Es un proceso más complicado que depende de la comunidad autónoma.

 

Otros consejos para sobrellevar el tratamiento de reproducción asistida

Como podéis ver, tener un hijo mediante otras vías puede convertirse en una aventura. Para unas parejas puede ser más corto y llevadero y, en otros casos, podría complicarse. No obstante, hay que armarse de mucha paciencia. ¡Vosotros podéis! Aquí os dejamos unos pequeños consejos:

● Como padres, debemos seguir paso a paso el proceso de reproducción asistida, con todas las de la ley. Poco a poco iremos cumpliendo nuestras pequeñas metas hasta el día de quedar embarazados. ¡Mucha paciencia! Y no abandonéis a la primera de cambio. Todo esfuerzo tiene su recompensa.

● Además de ser pacientes, hemos de confiar del equipo médico, porque ellos harán todo lo posible para que el embarazo se lleve a cabo a la perfección.

● En este camino, lo mejor será mantener la calma y crear inquietudes nuevas o cumplir con vuestras aficiones de forma normal. Las técnicas de relajación tales como el yoga o la meditación ayudará a despejar vuestra mente.

● Y, más importante todavía, mantened la comunicación en pareja. Expresad vuestros sentimientos y liberad las tensiones como buenamente podáis. Durante la espera, hay que disfrutar de lo que os brinda vuestro círculo social más cercano. ¡Ánimo y mucha fuerza!