La semana pasada os dejábamos un post con las claves para detectar y combatir una intoxicación alimentaria en nuestros pequeños ya que en verano el riesgo de padecerlas aumenta considerablemente.
En los meses de verano (entre julio y septiembre) se concentran unas 8.000 intoxicaciones alimentarias en España. Esta cifra es más de la mitad de las intoxicaciones producidas a lo largo del año.
Este fenómeno se debe a que las bacterias proliferan mejor a temperaturas en torno a los 36º.
En este post os vamos a detallar varios consejos para evitar las intoxicaciones llevando a cabo unos sencillos hábitos que, si bien deberíamos mantenerlos siempre, en estas fechas debemos prestarles especial atención.
Limpia bien la superficie y utensilios que utilices al cocinar y sobre todo antes y después de manipular alimentos crudos.
- Lávate bien las manos sobretodo tras ir al baño, sonarte la nariz o coger el teléfono.
- Lava con abundante agua las frutas y verduras que vayas a consumir. En verano, es recomendable añadir dos gotas de lejía por cada litro de agua si se van a consumir sin pelar y luego enjuagar bien.
- Las salsas deben consumirlas recién hechas. No es aconsejable guardarlas y menos si contienen huevo.
- Hay que descongelar los alimentos en el microondas con la función “Defrost” ó en la bandeja inferior del frigorífico durante 24 horas antes de utilizarlos. Pero nunca a temperatura ambiente en la encimera o mesa de la cocina, ya que de esta forma evitamos romper la cadena de frío.
- Lava los huevos antes de utilizarlos. Si algún trozo de cáscare cae sobre la clara o la yema, deséchalo.
- Cocina al menos a 70º, ya que es la temperatura necesaria para matar los microorganismos.
- No consumir leche cruda sin pasteurizar
- Evita el contacto de los alimentos con insectos y mascotas.
- Respeta la fecha de caducidad, especialmente en esta época.
- No comprar alimentos contenidos en envases deteriorados aunque tengan buen aspecto.
- Calienta las sobras a la temperatura máxima antes de servirlas y la cantidad justa que vayas a consumir para evitar tener que dejarlas enfriando antes de volverla a meter en la nevera.
- La basura debe almacenarse en recipientes cerrados y alejados de la comida.
- Si vais a consumir pescado crudo (sushi) o poco cocinado aseguraros que ha estado congelado al menos durante 24 horas a -20º.
- En bares y restaurantes asegúrate que los alimentos están conservados en las condiciones sanitarias adecuadas. Cuando estés en establecimientos públicos, rechaza los alimentos que no estén conservados en condiciones sanitarias adecuadas, es decir, los que no estén refrigerados ni protegidos en vitrinas.
- Evitar consumir alimentos en puestos callejeros que no cuenten con sistemas de protección como vitrinas o frigoríficos.
- Ante la duda de que un alimento pueda estar en mal estado, no tomarlo. En esta época aumentan las probabilidades de que realmente lo este.
- Conservar los alimentos del modo adecuado para evitar la proliferación y contacto con bacterias. Próximamente os traeremos un post donde abordar este tema con detalle.